A día de hoy no tener un entrenador personal o un grupo de amigos para salir a correr ha dejado de ser una excusa para no estar en forma.
Los relojes deportivos con GPS y pulsómetro tienen todo lo que necesitas para planificar tus entrenamientos, seguir el ritmo adecuado, analizar los resultados y mantener tu motivación al máximo.
Gracias a la sencillez en la transferencia de datos del reloj deportivo a tu ordenador, podrás cargar los resultados de tus entrenamientos en cualquiera de las redes sociales existentes para deportistas y atletas. Ahí podrás revisar sesiones de entrenamiento pasadas y podrás revisar las estadísticas y tu evolución. Asimismo te permiten ponerte en contacto con otros atletas, ya sean conocidos o no, y compartir con ellos tus resultados y tus entrenamientos. De esta manera podrás comprobar tus progresos y mantenerte firme en tus objetivos así como retarte con otras personas.
Otra de las grandes ventajas de entrenar con un reloj deportivo es que puedes mantener tu concentración plenamente en la técnica y en tu estado físico. Ya no tienes que preocuparte por contar el número de vueltas, la velocidad que llevas, los pasos por minuto o las pulsaciones. Todo eso lo hace el reloj por ti y lógicamente con mayor precisión de lo que tú pudieras hacerlo. Mientras tanto tu mente puede concentrarse en la forma en que apoyas el pie, o en la respiración para ir optimizando día a día la técnica.
Por último, una de las grandes aportaciones de los pulsómetros es el hacer un registro de tu actividad física diaria. Cuando conoces el número de pasos que das en el día, la distancia que recorres, las horas que duermes, la calidad de tu sueño y puedes marcarte objetivos es fácil que poco a poco lleves una vida más sana.
En esta infografía hemos reunido los 12 principales beneficios de entrenar con un pulsómetro.
Fuente: Pulsometros
